LA CARTA DEL PAPA FRANCISCO

 

 

 

Papa Francisco y Vladimir Putin

 

 

Cual voz que clama en el desierto,mientras el redoblar de los tambores y la parafernalia guerrerista ,ensordece y obnuvila las consecuencias funestas de un ataque militar de Estados Unidos y algunos aliados  contra Siria ,el Papa Francisco envió   ayer  una comunicación al Presidente Ruso, Vladimir Putin en su condición de anfitrión en San Petersburgo de la importante cumbre del Grupo de los Veinte (G-20) que reune esta semana  a los Jefes de Estados, Gobiernos y Bancos centrales de  las naciones industrializadas y emergentes que componen el 90% de la producción global y el 70% de la población en el mundo.

 

El contenido de la misiva de marras  es un desgarrador llamado del jefe de la iglesia católica para que el actual conflicto Sirio sea resuerto sobre bases pacíficas y negociadas , evitando a toda costa la búsqueda inútil de una salida militar al enfrentamiento civil mediante el cual radicales musulmanes intentan derrocar al presidente Bashar al-Assad .

 

La carta del Papa Francisco sobre Siria  es franca,precisa y contundente en el reclamo  a los líderes del G-20 para  “perseguir con coraje y determinación una solución pacífica a través del diálogo y la negociación entre las partes interesadas, con el sostén concorde de la comunidad internacional”. El Papa Francisco solicita con firmeza  "dejar a un lado la búsqueda inútil de una solución militar"con lo cual rechaza de plano una escalada armada en ese país, a sabiendas de que una tercera guerra mundial podría convertirse en un escenario posible si Siria cumple sus advertencias de defenderse y contraatacar a los paises que le agredan empeorado por la declaración Rusa hoy de que  ayudará a Siria si éste país es atacado.

 

Coincidiendo con todos los analistas  entendidos en la materia ,el Papa visualiza que al atacar militarmente a Siria el remedio será  peor que la enfermedad ,dado el hecho de que la población civil aportará las mayores cuotas de víctimas colaterales por  la indiscriminada lluvia de bombas y misiles sobre el territorio ,por lo cual enfatiza  que "todos los gobiernos tienen el deber moral de hacer todo lo posible para garantizar la asistencia humanitaria a las personas que sufren debido al conflicto, tanto dentro como fuera de las fronteras del país".

 

La postura del Papa Francisco al oponerse a una escalada  militar en Siria le enaltece y honra, al asumir un compromiso firme y decidido en favor a una salida negociada y política que evite el derrumbe eonómico del planeta,la vuelta  al militarismo y por sobre todas las cosas una  catastrófica   conflagración militar mundial en la que todos ,absolutamente todos los habitantes de la tierra  ,   sufriremos  en carne propia los nefastos resultados.

 

 

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