Dentro de los cinco cubanos arrestados en septiembre del 1998 en la Florida por el Buró Federal de Investigaciones (FBI en inglés)bajo la acusación de integrar una red de espionaje dedicada a infiltrarse en las organizaciones de exiliados cubanos ,estuvo además de Ramón Labariño Salazar,René González,Antonio Guerrero y Fernando González, el exveterano de la guerra en Angola y caricaturista,Gerardo Hernández.
En el largo juicio en el cual -cómo era de esperarse en la Florida- los cinco integrantes de la unidad de élite en la Dirección de Inteligencia (DI) Cubana conocidas como "Las Avispas"fueron condenados a largas penas en prisión.Gerardo Hernández , a quien se le sindicara como líder del grupo, recibió una condena de dos cadenas perpetuas y por si las moscas, le adicionaron 15 años más.
En el trajín de las negociaciones de alto nivel para obtener la libertad de los cinco detenidos, el senador norteamericano Patrick Leahy viajó a la Habana con la misión de constatar las alternativas que pudieren acercar a los polos opuestos estadounidense y cubano,discrepancias agravadas por la condena en cuba del contratista de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID en inglés) ,Alan Gross,también por espionaje, que para colmo amenazaba con suicidarse en la prisión caribeña.
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| Adriana Pérez y Gerardo Hernández |
Apremiado por la desgracia latente de un suicidio en ciernes y conociendo las ansias de Adriana Pérez, esposa de Gerardo por procrear un hijo con su amado esposo, encarcelado en la Florida,el senador Leahy,lleva la propuesta de su asesor Tim Rieser al gobierno cubano:mejores condiciones para Alan Gross a cambio de procurar viajes y permiso de visitas conyugales entre Gerardo y Adriana.El gobierno cubano accedió, pero ahhh! las visitas fueron denegadas por Estados Unidos.
Tim Rieser entonces elabora una nueva propuesta tramitada a su vez por el senador a las autoridades cubanas, la inseminación artificial, para lo cual existía precedente legal y es así como luego de intentos fallidos en el lleva y trae de la esperma a Panamá que Adriana Pérez, a los 43 años y desde hace 8 meses y medio, está embarazada.
La sensibilidad de ambos bandos manifestada frente a los requerimientos de esta pareja enamorada desde siempre, pero separada por circunstancias difíciles e imprevistas,sentó las bases para el acuerdo humanitario de excarcelaciones recíprocas y un nuevo recomenzar diplomático entre dos gobiernos que por décadas han sido adversarios y ahora, a partir de ese embarazo, extienden puentes de entendimiento que seguramente marcarán futuros capítulos de altas y bajas ,pero dentro de los cuales descollará esta singular historia de espías y de amor.
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