Ahora que en estos dias se ha procedido a la exhumación de los restos mortales del Presidente Chileno Salvador Allende Gossens no puede uno sino admirarse del temple y la gallardía mostrada por este mandatario en los últimos momentos de su vida.
Bien conocida es su trayectoria politica desde sus inicios en la Federación de Estudiantes Chilenos (FECH) pasando por el Ministerio de Salud, la presidencia del Congreso de Chile hasta llegar luego de varios intentos a la primera Magistratura , todos esos puestos ganados en condiciones de extrema dificultad, saliendo airoso esencialmente por su férrea voluntad politica ,acrisolada disciplina y convicción de principios.
Cuando fue informado de los aprestos golpistas por parte de la banda facistoide que encabezaba Augusto Pinochet en la madrugada del 11 de septiembre, lejos de amilanarse o correr a asilarse a una embajada extranjera como es la norma y costumbre de los políticos sin principios , decidió irse al palacio de la Moneda a sabiendas de no saldría vivo de allí.
Discurso de Salvador AllendeEs en un panorama de intensos bombardeos aéreos y terrestres, acompañado por algunos amigos del GAP (Grupo de Amigos Personales) que decide pronunciar sus últimas palabras transformadas por el tiempo en una lección de honor y gallardía para las generaciones presentes y futuras de políticos en el mundo.
Sus méritos no serán disminuidos en lo absoluto si los nuevos experticios demuestran que realmente Salvador Isabelino del Sagrado Corazón de Jesús Allende Gossens decidó suicidarse como un gesto cimero de protesta ante el avance irremediable e indetenible de las fuerzas golpistas. Todo lo contrario, demostrará que no temió en ofrendar su vida por la patria si ese era el precio a pagar por la fidelidad a sus ideas y al pueblo.
Si escuchamos su discurso final, notamos que es preciso, firme, premonitorio y un material de valioso estudio didáctico, histórico y político.
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